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La importancia de congregarse

La Biblia enfatiza la importancia de congregarse en una iglesia donde se enseñe fielmente la Palabra de Dios y, en ausencia de una iglesia sana en un área, la responsabilidad de plantarlas. Aquí hay una base bíblica para ambos puntos:


1. Asistencia a una iglesia que enseñe correctamente la Palabra de Dios.


Si hay una iglesia sana en el área, los creyentes tienen el deber de congregarse allí.


Hebreos 10:24-25 – "Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca."


La iglesia local es el lugar donde los creyentes se edifican, se exhortan y sirven juntos.


Hechos 2:42 – "Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones."


La iglesia primitiva se reunía consistentemente para recibir enseñanza, comunión y oración.


1 Timoteo 3:15 – "...para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad."


La iglesia local es el soporte de la verdad y debe mantenerse firme en la sana doctrina.


2. La responsabilidad de las iglesias sanas de plantar nuevas iglesias.


Si no hay una iglesia sana en el área, las iglesias establecidas tienen la responsabilidad de plantar nuevas congregaciones.


Mateo 28:19-20 – "Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado..."


La Gran Comisión implica no solo evangelizar, sino también enseñar y establecer iglesias donde se enseñe la Palabra.


Hechos 14:23 – "Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído."


Pablo y sus colaboradores plantaban iglesias y establecían liderazgo para su crecimiento.


Tito 1:5 – "Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé."


Pablo dejó a Tito con la misión de organizar y fortalecer iglesias en distintas ciudades.


Romanos 15:20 – "Y de esta manera me esforcé a predicar el evangelio, no donde Cristo ya hubiese sido nombrado, para no edificar sobre fundamento ajeno."


Pablo tenía una carga especial por llevar el evangelio a lugares sin iglesias establecidas.


En conclusión, los creyentes deben congregarse en iglesias que enseñen fielmente la Palabra de Dios. Si no existe una iglesia sana en su área, las iglesias establecidas tienen la responsabilidad de plantar nuevas congregaciones para la gloria de Dios y el avance del evangelio.

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